Llevando la agricultura sustentable a la comunidad hispanohablante
Angie Oliva es una inmigrante de primera generación. Después de servir en el U.S. Army durante 22 años, ella encontró una nueva carrera: ayudar a que la agricultura orgánica sostenible sea más accesible para la población de habla hispana en el condado de Chatham y sus alrededores.
“Fui criada por mis abuelos maternos en México, mientras mi madre trabajaba en Estados Unidos,” dijo Oliva. “Los padres de mi madre, sus padres y sus padres antes que ellos eran todos agricultores. Por eso, volver a la agricultura es realmente un honor para mí y espero honrar a mi linaje y a mi familia.”
Oliva también espera que muchos otros hispanohablantes en la comunidad sientan lo mismo acerca de reconectarse con su cultura natal a través de la agricultura.
El Programa del Centro Sureste para la Transición Orgánica conocido como SE TOPP ofrecerá un currículo gratuito en español de agricultura orgánica y sostenible este otoño. El programa estará disponible en español en Central Carolina Community College en Pittsboro.
“Por nuestra parte, lo que decidimos hacer fue traer este programa en español, para hacerlo culturalmente apropiado y brindar capacitación de agricultura orgánica a nuestra comunidad local,” explicó Oliva. “Estamos en las etapas de desarrollar el currículo de estudios y nos gustaría comenzar a ofrecer clases este otoño a las personas interesadas.”
El programa durará entre 10 y 11 semanas e incluirá aprendizaje en el aula sobre los diferentes aspectos de la agricultura sostenible. Luego, los estudiantes irán a la granja en las instalaciones de Pittsboro para aprender de manera práctica.
Al final de esas 11 semanas, todos los participantes recibirán un certificado de conclusión que podría ser útil para conseguir empleo en una granja orgánica o empezar su propio negocio.
La granja en CCCC es completamente sustentable y orgánica, sin pesticidas, fungicidas ni aerosoles químicos utilizados en ninguna de las plantas. “Si vas de un extremo a otro de esta finca, y es una finca de un acre, no hay una planta comestible que no puedas recoger y comer, ahí mismo,” dijo Oliva.
La agricultura sostenible hace lo correcto al considerar las tradiciones de las culturas, las tradiciones agrícolas que se usaron durante miles de años, incorporando la ciencia, la investigación y tecnología para lograr verdaderamente un ecosistema agrícola saludable.”
Ella señaló que la comunidad Latina es una parte integral de la agricultura de nuestra nación. “Lo ha sido durante generaciones,” dijo Oliva. “El hecho es evidente aquí en Carolina del Norte, cuando miramos la encuesta nacional de trabajadores agrícolas del USDA de 2020, sabemos que aproximadamente el 80% de los trabajadores agrícolas contratados en Carolina del Norte informaron que hablaban español como idioma principal. Y esto no incluye a los trabajadores H-2A o H-2B, que también vienen todos los años como trabajadores transitorios.”
Oliva recordó que al crecer con sus abuelos en México, muchas comunidades rurales estaban formadas de agricultores. “Esa era una profesión respetada,” dijo ella. “Lo que vemos ahora es que históricamente y en tiempos recientes, un inmigrante que ingresa a la industria agrícola en los Estados Unidos está ingresando a una ocupación altamente explotadora y realmente peligrosa que ofrece un salario muy bajo, y peor aún si eres un trabajador agrícola en la costa este. Estos son solo datos e investigaciones que lo demuestran. Hay aún menos protecciones para los trabajadores agrícolas inmigrantes. Es un sistema que despoja al inmigrante de la dignidad de ser agricultor. Quiero decir, esta es una profesión honorable, pero fractura su trabajo y aleja a las personas de las tradiciones agrícolas que traen consigo.”
Ya que las granjas sostenibles suelen ser de menor escala – de uno a 15 acres en la mayoría de los casos – hay menos posibilidades de que los trabajadores agrícolas sean explotados o puestos en situaciones peligrosas, añadió Oliva.
“En la comunidad [de agricultura sostenible], muchos están abiertos a integrar el conocimiento tradicional e indígeno de prácticas agrícolas porque la salud de la granja y su gente es de suma importancia,” dijo Oliva. “No siempre es la ganancia financiera de crecimiento comercial.”
En la opinión de Oliva, la mayoría de agricultores y trabajadores agrícolas de habla hispana son “invisibles” en la agricultura estadounidense, a pesar de que constituyen la mayoría de la fuerza laboral. Por lo tanto, eso limita su exposición a otras formas de agricultura.
“No creo que sea un problema de no saber de agricultura sostenible, mucho tiene que ver con cuestiones de acceso,” dijo Oliva. “El idioma es una barrera muy desafiante y no es que todas las personas que hablan español no pueden o no quieren aprender inglés, pero se necesita tiempo para aclimatarse a una nueva cultura, un nuevo lugar. Y uno no viene aquí para aprender. Uno viene aquí para trabajar y ganarse la vida.”
Por eso es importante que el programa se ofrezca en español. “Para muchos de nosotros, la agricultura es algo que nos une,” dijo Oliva. “Mi historia de venir aquí y buscar una carrera en el ejército y luego regresar a la agricultura, probablemente no sea muy única, pero la comparto con muchas familias inmigrantes. Uno viene a Estados Unidos y trata de encontrar trabajo en cualquier lugar donde lo pueda encontrar, y eso significa dejar atrás las tradiciones que tenías, y dejar atrás las habilidades que tenías.”
La agricultura sostenible es una forma de devolver esas tradiciones a la comunidad de habla hispana. “En cualquier familia, en cualquier generación, estás a sólo una generación de perder esos vínculos culturales con la tierra,” dijo Oliva. “Ahí es donde está mi interés de acercar a nuestra gente, ya sea de Centroamérica, Sudamérica, el Caribe o México, nuestro idioma común y nuestro amor por la buena comida pueden tener un gran impacto. Es una comunidad que está en gran medida ausente del movimiento de agricultura sostenible en Estados Unidos.”
Para obtener más información sobre el programa SE TOPP en Central Carolina Community College, comuníquese con Angie Oliva al correo [email protected] o llámela al 808-208-9708. Visite
para obtener más información sobre el programa en general.