Los Jets planean usar su primera pérdida como oportunidad de aprendizaje
By VICTOR HENSLEY
SILER CITY — La confianza de los Jets quizás estaba por las nubes, pero su ofensiva quedó atrapada debajo de ella.
El equipo de fútbol masculino de Jordan-Matthews se quedó corto en una batalla defensiva, 1-0, contra los Wheatmore Warriors el miércoles, lo que resultó en su primera derrota de la temporada. Mientras la defensa de los Jets estuvo al borde de lo fenomenal durante toda la noche, su ofensiva fue poco satisfactoria, ya que se mantuvieron sin goles durante todos los 80 minutos.
“Ofensivamente, simplemente no estábamos en nuestro mejor juego esta noche”, dijo el director técnico de Jordan-Matthews, Paul Cuadros. “Creo que estábamos mirando más allá de este equipo y nuestra confianza probablemente era mucho más alta de lo que debería haber sido y no estábamos organizados, no nos estábamos comunicando entre nosotros y no estábamos cooperando entre nosotros”.
Al entrar la partida del miércoles, los Jets tenían un récord de 2-0 en el año y habían ganado contra Trinity, 4-1, y Eastern Randolph, 4-2.
Habiendo anotado ocho goles en dos juegos y jugando contra un equipo que había permitido al menos tres goles en dos tercios de sus juegos esta temporada — incluida una derrota por 4-1 ante Eastern Randolph dos días antes — parecía seguro asumir que los Jets sería capaz de anotar.
Pero asumir a menudo es arriesgado.
“Tuvimos éxito la semana pasada y sabíamos que Wheatmore había perdido el lunes”, dijo Cuadros. “Creo que los muchachos pensaron que este iba a ser un tipo de juego diferente al que era, pero bueno, esto es fútbol, ??y el mejor equipo no siempre gana”.
A lo largo del juego, especialmente en la primera mitad, Wheatmore dedicó muy poco tiempo a juntar una posesiva ofensiva sustancial. Los Warriors ni siquiera hicieron su primer tiro hasta casi 20 minutos después de que la competencia comenzó.
Mientras solo intentaron seis tiros en toda la noche, el que realmente contó fue en los últimos segundos de la primera mitad.
Brian Hernández de los Jets intentó regatear a Jagur Williams de Wheatmore justo fuera del arco de penalti, pero Williams inmediatamente lo derribó. Tomó posesión e hizo un hermoso pase a través del mediocampo, sobre las cabezas de tres defensores de los Jets, a Collin Burgess, quien dribló velozmente por el campo y corrió el balón más allá del portero para un gol acelerado. El marcador: 1-0, Wheatmore.
Solo quedaban 1.7 segundos en esa mitad.
“Fue matador. Llevo entrenando casi 20 años, así que lo he visto todo”, dijo Cuadros. “Todavía teníamos la mitad por delante, todavía teníamos 40 minutos por delante para igualar y ganar el partido. Ese (gol) realmente no me afectó mucho más que esta es una colina que ahora tenemos que escalar”.
En el otro extremo, parecía que los Jets estaban al punto de un gol que cambiaría el juego una y otra vez, pero Wheatmore se mantuvo firme y nunca los dejó marcar.
Problemas con la comunicación y la explosividad plagaron a Jordan-Matthews, ya que las posibles oportunidades de anotar se desvanecieron gracias a pases inoportunos, tiros fallidos por poco y jugadores que sostienen el balón demasiado tiempo.
Los Jets terminaron el día con 12 tiros a la portería, duplicando el total de Wheatmore, pero salieron vacíos cada vez que el portero de los Warriors Austin Poplin acumuló 12 salvadas en la noche.
“No tuvimos la intensidad esta noche y creo que eso es parte de la actitud de los adolescentes”, dijo Cuadros, riendo. “Necesitábamos hablar entre nosotros mucho más de lo que lo hacíamos y coordinarnos, a través de la comunicación, para que estemos todos en la misma página”.
Una victoria sobre Wheatmore habría puesto a Jordan-Matthews en posesión exclusiva del primer lugar en la Conferencia PAC 7 2A. Ahora, los Jets están en segundo lugar con 2-1, con Wheatmore (2-1-1) pisándoles los talones con el título de la conferencia “en juego”, describió Cuadros.
Mientras el resultado no fue a favor de Jordan-Matthews, Cuadros se consoló con la defensa — incluido el portero Ricardo Rocha, quien tuvo cinco salvadas en un juego en el que no tuvo que hacer demasiados — y planea usar esta pérdida como una oportunidad de aprendizaje.
Después de todo, a menudo se dice que se aprende más perdiendo que ganando.
“A veces una derrota es lo mejor que le puede pasar a un equipo joven porque entonces aprende”, dijo Cuadros. “Aprenden que tienen que presentarse cada vez. Aprenden que tienen que tener esa intensidad cada vez. Aprenden que no pueden subestimar a ningún oponente y luego juntan todos esos elementos. Ahora podemos averiguar de qué están hechos”.
Traducido Victoria Johnson y Patsy Montesinos