‘La necesitamos mucho’: Latinos de Chatham comparten esperanzas y temores por el mandato de Biden
By VICTORIA JOHNSON
Ruben Ocelot, residente de Siler City, quiere que el gobierno federal apruebe una reforma migratoria más que cualquier otra legislación — y ahora que Joe Biden está tomando las riendas de la presidencia estadounidense, cree que podría pasar.
“La necesitamos mucho”, dijo, y luego agregó: “Quiero decir, la reforma migratoria — ayudaría a mucha gente en mi comunidad”.
Cinco residentes latinos de Chatham, incluido Ocelot, le dijeron al News & Record que tienen grandes esperanzas para el mandato de Biden. Además de la reforma migratoria, algunos esperan que Biden y su gobierno trabajen para controlar la pandemia y crecer la economía. Sin embargo, al mismo tiempo, les preocupa que Biden no pueda unir a un país dividido.
Entre otras promesas, Biden, un demócrata, se ha comprometido a revertir las pólizas migratorias de Trump, brindar protección permanente a los beneficiarios de DACA y trabajar para brindar a los inmigrantes indocumentados un camino hacia la ciudadanía.
Las dos últimas promesas, dijo Ocelot, marcarían una gran diferencia para muchas familias hispanas en el condado de Chatham, incluida la suya, y por eso espera verlas cumplidas.
“Tengo hermanos que tienen DACA”, dijo. “… Verlos luchar ahora con el coronavirus, tener que pagar más de $500 para enviar sus solicitudes y luego tener que volver a solicitar una licencia de conducir — es simplemente triste. Me siento afortunado y agradecido todos los días por no tener que pasar por eso, pero me duele verlos pasar por eso”.
Espera que la nueva administración y el Congreso aprueben una legislación que ofrezca a los beneficiarios de DACA un camino hacia la ciudadanía.
“Han estado aquí toda su vida, así que no veo por qué tendrían que irse a otro lugar cuando crecieron aquí”, dijo. “Como, este es su hogar. Aquí es donde pertenecen”.
Brindarles a los inmigrantes indocumentados un camino hacia el estatus legal, dijo, también permitiría a las familias reunirse o visitar a sus seres queridos que no han visto en muchos años después de ingresar ilegalmente a los EE. UU.
“Algunas personas no han visto a sus padres durante 20 años”, dijo, y agregó: “Mis padres — sus padres fallecieron y nunca los volvieron a ver. … Me duele que hayan pasado por eso, y espero que otras personas que aún tienen a sus padres vivos tengan la oportunidad de ir a verlos”.
Franklin Gómez Flores, el primer comisionado latino de Chatham, dijo que también le gustaría ver a familias indocumentadas ganar un camino hacia la ciudadanía.
“Para aquellos a quienes no les gusta la inmigración”, dijo, “realmente un plan para reducir la inmigración sería reducir / eliminar la intervención de Estados Unidos en los asuntos gubernamentales de los países latinoamericanos”.
Más allá de esas dos promesas, Alirio Estévez, el líder de Voto Latino Chatham, también le gustaría que Biden proteja y expanda las designaciones del Estatus de Protección Temporal (TPS por sus siglas en inglés). Esta designación brinda protección temporal contra la deportación y permiso de trabajo a personas que huyen de la violencia o desastres naturales de ciertos países, como El Salvador. El gobierno bajo Trump tomó medidas para eliminar gradualmente el TPS para personas procedentes de algunos países, y los tribunales hasta ahora han favorecido el gobierno, pero el litigio sigue todavía.
“Me gustaría que Biden aborde eso y que también incluya a personas de Venezuela”, dijo Estévez. “La gente necesita refugio de Venezuela … Están aquí huyendo del tiránico presidente Maduro”.
También quiere que Biden detuviera las “redadas indiscriminadas de ICE”.
“A veces persiguen a mucha gente e intimidan a muchas familias: familias latinas, familias asiáticas, familias africanas”, dijo. “Van por personas que son familias trabajadoras, padres y tienen muchos hijos”.
Muchos activistas latinos en los Estados Unidos han dicho que Biden le debe a la comunidad latina y Estévez está de acuerdo. La administración de Barack Obama deportó a cientos de miles de inmigrantes — más que la administración de Trump según el Pew Research Center — y no pudo cumplir la reforma migratoria que Obama prometió. Los activistas llamaron a Obama “el Deportador-en-Jefe”.
“El hecho de que deportó a muchos inmigrantes, especialmente a los padres, fue algo que hizo que algunas personas se mostraran escépticas con respecto a Biden, y entiendo ese punto de vista”, dijo. “Pero diré, con suerte, que él ha aprendido la lección y sabe que tiene que cumplir (su promesa). Tiene que hacer algo con respecto a la inmigración y hacerlo realidad”.
El programa DACA, creado bajo la administración de Obama, fue “un paso adelante”, dijo Ocelot, y ahora espera que Biden empiece la reforma otra vez.
“Confío en él”, dijo. “Tenemos una vicepresidenta, así que sé que está tratando de mirar hacia adelante y trabajar para que avancemos adelante, no para atrás”.
Paul Cuadros, residente de Pittsboro y director técnico de fútbol masculino de Jordan-Matthews, dijo que él también cree que el país necesita una reforma migratoria después de 30 años de “lidiar mal con esto”.
“Creo que el país tiene la obligación de mantener su soberanía en todas sus fronteras y en sus puertos de entrada”, dijo. “Entonces eso debe equilibrarse con las necesidades que tenemos de mano de obra y las necesidades que tenemos para que nuestra población siga creciendo”.
Pero hasta que el gobierno controle la pandemia y planifique otras futuras, dijo que no cree que la administración Biden realmente pueda comenzar trabajo en otros temas. Mejor manejo de la pandemia y vacunación masiva y eficiente — esas son dos prioridades que Cuadros espera que la administración entrante trabaje en los primeros 100 días.
“Espero que la administración de Biden pueda sacar la vacuna en el próximo mes, dos meses, tres meses y más, para que podamos comenzar a dejar atrás la pandemia”, dijo. “Y luego, en los próximos años, ya sabes, si podemos controlar la pandemia, podremos empezar a hacer crecer la economía”.
Ocelot y Estévez también esperan que la administración de Biden acelere el proceso de distribución de la vacuna y anticipan con gusto el paquete de estímulo COVID-19 de $1.9 billones propuesto por Biden.
“(La pandemia) se está yendo de las manos, o ya está fuera de control”, dijo Ocelot, y agregó: “Quiero decir, lo he visto de primera mano. Me dolía ver a (mi papá) pasar por eso. Afortunadamente, yo no tenía síntomas, pero él no fue tan afortunado. … Hubo un día en el que le costaba respirar, y estaba como — se estaba preparando, se puede decir. Fue difícil”.
Más allá del COVID-19, varios residentes, incluidos Ocelot y Estévez, han expresado esperanzas de que el nuevo gobierno federal aumente los impuestos a quienes ganan más de $400,000 al año, eleve el salario mínimo a $15, aumente los fondos para la educación y amplíe la cobertura de atención médica. Una residente de Siler City, Kimberly Lara, de 19 años, también dijo que espera que él aborde el cambio climático.
“Tengo grandes expectativas para Biden”, dijo, y agregó: “Él ha creado un plan para ayudar a combatir el cambio climático que es similar al Green New Deal. … Estoy muy emocionada por sus planes económicos de aumentar los impuestos para los ricos y aumentar el salario mínimo”.
“Ya no estamos en 2005”, agregó Ocelot. “Los precios están subiendo. La gente apenas puede pagar el alquiler con este salario mínimo que tenemos ahora”.
Más allá de los salarios, Gómez Flores le dijo al News & Record que le gustaría que el gobierno federal mejorara las leyes y beneficios laborales también.
“Muchos de los miembros de nuestra comunidad están sobrecargados de trabajo y mal pagados, dedicando innumerables horas al trabajo y no lo suficiente a la familia”, dijo. “Espero una administración que ponga a las personas y las pequeñas empresas locales necesitadas en primer lugar”.
‘Con suerte, comenzamos este proceso de curación’
Sin embargo, a casi todos los entrevistados les preocupa si Biden podrá sanar la división política de la nación, como prometió en su discurso de victoria en noviembre pasado — especialmente después de los disturbios en el Capitolio del 6 de enero y el posterior juicio político de Trump.
“En noviembre, (Biden) dijo que la unidad es lo más importante para él, y estoy de acuerdo”, dijo Lara. “Somos tan rápidos para juzgar a la gente; deberíamos tomarnos un segundo para mirar el panorama más amplio y reevaluar nuestros morales. Mi mayor preocupación es que no cumpliremos con nuestras expectativas y eso aumentará la división”.
Los disturbios y la amenaza de violencia tocaron una fibra sensible en Estévez, quien emigró a los Estados Unidos desde Colombia.
“La forma en que veo Washington, D.C. ahora mismo es como cuando era un niño en Colombia, y ves soldados por todas partes en la ciudad, en Bogotá”, dijo. “… Me siento como si estuviera de regreso en mi país, país del tercer mundo, en medio de la Guerra Fría. Eso asusta”.
Con base en eso, dijo que cree que Biden intentará restaurar la unidad, aunque últimamente, cree que dependerá del pueblo estadounidense.
“No dudo que él quiera ser un país unido, pero para unir hay que tener dos partes dispuestas a estar juntas”, dijo Estévez. “Y hasta ahora, solo lo veo tratando de estar juntos, y el otro liderado por Trump no lo quiere en absoluto. Con suerte, cambiarán de opinión”.
Aunque la decisión final recae en los ciudadanos, Cuadros dijo que Biden aún podría llevar a la gente en una determinada dirección.
“Hemos visto eso en las últimas dos semanas cuando la gente se extravía por la desinformación y las mentiras, y cómo la gente puede entusiasmarse para hacer cosas malas”, dijo. “(La) pregunta que debemos hacernos es … ¿Puedes inspirar a la gente a hacer cosas buenas? Para eso se necesita un líder realmente especial. Así que creo que eso está por verse con el presidente electo Biden”.
Pero ahora mismo, Cuadros se preocupa de que ambos partidos no puedan unirse para gobernar.
“Hemos tenido un estancamiento en el gobierno durante mucho tiempo, pero estamos en una crisis nacional y no podemos tener un estancamiento en este momento”, dijo. “Necesitamos racionalizar las cosas para poder responder a la pandemia y poder restablecer la economía”.
Las divisiones políticas no se curarán de la noche a la mañana, dijo Ocelot, pero mantiene esperanza.
“Necesitamos trabajar todos juntos porque en este momento, no estamos unidos; estamos todos divididos”, dijo. “Y es triste porque tenemos que hacer las cosas y seguir adelante y ser un país mejor por completo. Con suerte, comenzamos este proceso de curación. Espero un mejor Estados Unidos que trabaje juntos, sin importar (sus) lados políticos”.